Esta nueva versión del Superclásico chileno tuvo nombre propio: Lucas Barrios, quien fue el autor de los goles con los que Colo- Colo derrota a su máximo adversario, en un Estadio Monumental repleto con 40 mil personas.
Los albos recibían a la U, con un pésimo rendimiento en sus últimos partidos disputados y con criticas a su juego y al que se supone debe ser el creador del equipo, Macnelly Torres.
En tanto, los universitarios venían como punteros del campeonato, con un juego sólido y efectivo y con jugadores como Estévez y Milla, que se destacaban en las anteriores fechas.
Aparte queda comentar la fea actitud que tuvo Daud Gazale en los días previos, al provocar a la hinchada azul con su pisada a la bandera de la U, que estaba en el suelo afuera de la cancha de entrenamiento albo.
En fin. Volviendo al encuentro, que dirigió Jorge Osorio, empezó con la Universidad de Chile a toda máquina, atacando por los costado y buscando de inmediato el gol. Colo-Colo en cambio, fue inteligente y capaz de aguantar los embistes, con unos Jara y Kalule implacables. Además los albos fueron capaces de dominar la posesión del balón, abrían la cancha y esperaban a generar alguna ocasión de gol.
Fue en el minuto 36, cuando los caciques tocaban alrededor del área contraria y un balón que llego a Millar, que toco de primera entre las piernas a Olarra. La pelota llega a Lucas, quien luego de un rebote, no perdono y abría el marcador. Era gol cacique y se desataba el carnaval. Luego de eso no hubo mucho en el primer tiempo, que se terminaba entre el gozo de la hinchada popular.
El segundo tiempo empezaba de igual manera al principio: con los azules adelantados, buscando un gol y con un Colo-Colo recogido cerca del área, intentando salir de contragolpe. Esto fue más notorio, cuando en una jugada que terminaría Estévez, fue Lucho Mena quien hizo un feo foul sobre el argentino y Jorge Osorio expulso al defensa colocolino. Con esto los azules se vinieron encima y descuidaron la retaguardia.
Esto lo aprovechó de nuevo Barrios, quien pese a jugar enfermo, se mando un carrerón desde mitad de cancha y después de esquivar tres defensores azules, definió como crack al costado y cerró el partido. Eran tres puntos y Lucas salvaba a Barticciotto de una crisis que se podía venir a Pedreros.
Después de esto, la U acentúo su búsqueda de gol, intentando y en una confusa jugada, donde Riffo derriba al Matador dentro del área, el arbitro pitaba penal.
Fue Salas el encargado de ejecutarlo, y como en todo el partido, no fue capaz de ponerse el equipo al hombro y erró el tiro. Se acababan las esperanzas azules y los tres puntos quedaban en casa.
Destacar: la diferencia física de Barrios por sobre el resto. La jerarquía que muestra Jara y la constante peligrosidad que tiene Figueroa cada vez que sube al ataque.
Por parte azul, poco. Salas ya no es factor decisivo y Sallah vuelve a fallar en los partidos importantes, demostrando que no es casualidad su apodo de pecho frío.
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